viernes, 4 de octubre de 2013

Guía en el Camino Ignaciano2

Guía en el Camino Ignaciano 2

Este es el relato de mis últimos días pasados con el grupo de Peregrinos australianos en el Camino Ignaciano comenzado en Loyola y terminado en Manresa.
29.09.13. Domingo.
Desde Zumarraga me traslado con el coche para reincorporarme con el grupo de Peregrinos australianos en el Camino Ignaciano y andar las últimas etapas del mismo.
Cuando llego a La Panadella, intermedio de la etapa  entre Cervera e Igualada, para comer me encuentro con el grupo. Están haciendo la parada de medio día también para comer.
Tres de los peregrinos, Dani, Sandra y Patrick Hynes tienen problemas para seguir por lo que me ofrezco a llevarles hasta Igualada en el coche después de comer.
Ya en Igualada les llevo al Hotel Ciutat de Igualada donde van a pernoctar y luego me dirijo al punto de recogida de las llaves del Refugio de peregrinos de Igualada, donde me instalo para pasar la noche. Al poco tiempo llega otro peregrino de Tarragona que está andando el Camino de Santiago viene desde Montserrat.
Más tarde llegan otros dos peregrinos, Santiago, de Zaragoza y ya experto en el mismo acompañado de un alemán que también ha recorrido distintos Caminos de Santiago. Tras mantener una larga conversación con Santiago nos dirigimos a cenar al bar Aurora, que lo conozco de otras ocasiones y después nos retiramos a dormir en el albergue.
Recibo un aviso del grupo que mañana comenzaremos a las 8:30 frente al Hotel.
 
26ª Etapa. Igualada – Montserrat. (26,8 km) Lunes 30.
A la hora prevista nos reunimos para hacer las peticiones del día, sobre qué reflexionar en la jornada y cantar la canción del Peregrino.
Nos ponemos en marcha. Tres de los peregrinos con problemas físicos se reservan el día de hoy para poder cumplir mañana el objetivo de caminar desde Montserrat a Manresa.
Tras atravesar el polígono industrial de Igualada que se hace pesado por el tráfico, nos despedimos de la carretera en la que hay mucha circulación de vehículos y tomamos la carretera a Castellolí, localidad a la que llegamos a la hora ideal para reponernos con un café y unos refrescos. Ya comienza a calentar el sol.
Proseguimos el Camino y al poca de salir del pueblo ya abandonamos el ruido del tráfico intenso después de pasar sobre la A-2. Comenzamos la subida del puerto del Bruc por la carretera y unos metros más adelante la abandonamos pera ir atajando por un camino bien marcado hasta llegar a Sant Pau de la Guarda.
Después de atravesar el pueblo sin haber visto a ninguna persona en el mismo llegamos al otro extremo, donde se encuentra la Iglesia y el restaurante El Celler, pero éste se encuentra cerrado.
Una señora, amablemente nos ofrece agua para poder refrescarnos y avituallarnos. Descansamos un largo rato que aprovechamos para comer.
Volvemos a ponernos en marcha y vamos dejando atrás el pueblo por un camino bien marcado y llegamos a lo alto de Can Massana. El descenso desde el alto hasta la carretera se hace dificultoso por lo escarpado del terreno y porque son muchos kilómetros acumulados en las piernas y las rodillas sufren muchísimo, pero también esto se supera con buen ánimo.
A partir de aquí tomamos la carretera que tras nueve kilómetros nos conduce hasta Montserrat, final de la etapa de hoy. Junto a la Emita de Santa Cecilia hemos hecho un descanso y continuamos la marcha. Son las 16:30 cuando llegamos a Montserrat.
Los australianos se hospedan en el hostal Abad Cisneros y yo me dirijo al Centre de Coordinación Pastoral para sellar la credencial y recoger las llaves del Albergue.
Me hospedo en la habitación 1C en la que hay otra peregrina alemana del Camino de Santiago. En la habitación contigua hay otros dos peregrinos.
Después del aseo, un poco de descanso y tomar una cerveza con Joe (Josetxo) Taylor, en grupo nos dirigimos a las vísperas en las que los frailes cantan sus salmos y también lo hace la Escolanía de Montserrat. Después acudimos a misa en la capilla que está detrás de La Moreneta y que la celebra Michael Smith.
De vuelta al hostal cenamos todos juntos pues mis amigos australianos me han invitado a dicha cena. A los postres se hace la despedida a Peter y Chona Walden pues mañana ya no caminarán con nosotros porque tienen que partir a Barcelona.
Se celebra también el reconocimiento, a todo el grupo, uno por uno por lo que cada cual ha aportado al mismo. Por supuesto que con mucho cariño y mucho humor por parte de Van y Juan.
Me volvieron a mostrar su amistad y su agradecimiento regalándome un crucifijo elaborado por un aborigen australiano. Con mucha emoción les di las gracias por su amistad y diciéndoles que lo que he hecho con ellos, es lo mismo que otros han hecho por mí cuando lo he necesitado.
Es corresponder con el sentimiento que un peregrino guarda en su memoria por lo que ha recibido. Tras la despedida a Peter y Chona nos retiramos a descansar.
Hoy ha sido un día muy caluroso, 33ºC, pero íbamos bien provistos de líquido y alimento.
 
27ª Etapa. Montserrat – Manresa. (23,5 km). Martes 1.
Después de levantarnos y desayunar nos reunimos frente al Hotel para realizar el ritual de todas las mañanas. La oración, el pensamiento del día y la Canción del Peregrino. Esta vez había más expectación porque un grupo de Jesuitas y seglares de Indonesia, que también habían estado en Loyola, lo siguieron con mucho respeto. Hoy comenzamos todo el grupo a excepción de Peter y Chona que ya han partido hacia Barcelona.
Comenzamos la caminata dirigiéndonos hasta la imagen de la Virgen de Montserrat para hacerle una oración y una petición individual. Luego nos dirigimos a la carretera para llegar  de nuevo hasta la Ermita de Santa Cecilia.
Comenzamos a bajar por la pista de tierra que rodea la ermita y más adelante entramos en el camino de montaña para descender hacia Sant Cristofol y al poco de comenzar Dani se cae al suelo debido a la dificultad que para ella supone este terreno irregular.
Paramos y decido ir con Dani por un camino alternativo mientras los demás siguen por el mismo camino guiados por Larry con el GPS. Al final formamos un grupo de siete que andaremos unos kilómetros más pero con la seguridad de que Dani no tendrá tantos problemas y nos juntaremos más adelante.
Una vez todos juntos de nuevo continuamos la marcha y sin problemas pero con calor pasamos junto al pueblo de Sant Cristofol y la Ermita de Sant Jaume de Castellbell. Atrás queda la sierra de Montserrat. Llegamos al cruce de la carretera a Castellgalí y paramos en el restaurante El Racó donde hacemos un merecido descanso y hacemos la comida del día.
Tras reponernos, continuamos la marcha por el camino que nos lleva a la entrada de Castellgalí. Vamos pasando las distintas calles del pueblo y cuando llegamos a la cuesta de la Iglesia paramos en el parque para refrescarnos y proveernos de agua  en la fuente que se encuentra en el mismo. Un pequeño descanso y a continuar la marcha.
Comenzamos la bajada por la calzada romana y al llegar a la carretera para reagruparnos Michael dice que sigamos el grupo mayoritario adelante y Larry y Stepen que llevan los chalecos reflectantes y GPS acompañarán a Dani pues vuelve a tener dificultades.
Metidos en el arcén caminamos en hilera por la peligrosa carretera C-55. Una vez pasado el puente giramos a la izquierda para entrar en la pista que rodea el campo de golf. Yo me quedo en la esquina esperando que vengan los tres que se han rezagado pero no aparecen. A los cinco minutos me llama Geraldine, que se ha dado la vuelta del grupo anterior para que siga con ellos. No les había entendido bien la explicación anterior y es que nosotros seguiríamos juntos y los tres se arreglarían, así que retomamos la marcha y llegamos hasta la masía Can Cornet donde comenzamos la última cuesta del Camino.
A mitad de la cuesta ya estamos otra vez disgregados pues debido a la fuerte pendiente y el calor se van notando la falta de fuerzas. Después de esperar cinco minutos para volvernos a junta ya se han hecho tres grupos y así continuamos.
Michael está intentando comunicar con Larry y con Helen hasta que al final lo consigue. Paddy me da un número de teléfono de un taxi para que recojan a Dani. Se ha dado la vuelta antes de llegar a Can Cornet y lo esperará en el Club de Golf junto a la carretera. Realizo la llamada y al poco me confirman que el taxi ya está de camino.
Continuamos otra vez por el camino y nos reagrupamos antes de llegar al castillo de Mas Oller. Por detrás vienen dos grupos. En uno Helen, Sandra, Vin y Juan y en el otro más atrás Larry y Stepen que han continuado después de dejar a Dani.
Continuamos el camino y a unos trescientos metros antes de llegar a la Torre de Santa Caterina paramos para reagruparnos y hacer la entrada en Manresa todos juntos. A los cinco minutos llega el grupo de cuatro y al cuarto de hora más tarde lo hacen Larry y Stepen.
Todos juntos y algo más descansados reanudamos la marcha y pasamos junto a la Torre. Poco más adelante ya comienza a verse, como en una postal, la Seu y La Cova.
Iniciamos el descenso hacia el Pont Vel y antes de llegar a él nos reunimos en corro y cantamos la canción del Peregrino.
Recibo una llamada de Luis, de Nativa Travel, preguntándome dónde nos encontramos pues son las 18:25 y la recepción de La Cova se cierra a las 19:00. Le comento cómo estamos ya al otro lado del río Cardoner. Como estamos tan ajustados de tiempo no podemos hacernos una fotografía del grupo a la entrada de La Cova.
Con mucha satisfacción hacemos la entrada a la misma y todo son abrazos y felicitaciones por el objetivo cumplido. Nos recibe Josep Sugrañes, sub director de La Cova. Luego nos dirigimos a la escultura que representa a San Ignacio herido. Junto a su réplica comenzamos el Camino en Loyola.
Se hace el reparto de las habitaciones y quedamos todos para reunirnos a las 19:30 y asistir a la Misa que va a celebrar Michael en La Coveta de San Ignacio. Después de ésta vamos a juntarnos todos para cenar en el comedor de la Casa. Nuevamente enhorabuenas y felicitaciones. Como recuerdo les entregué una guía, posiblemente la primera que se publicó en Loyola, con las recomendaciones que hice tras mi primer Camino.
Hoy ha sido también una jornada dura por la alta temperatura. Se ha llegado a los 34ºC.

Manresa. Día de descanso y despedida. Miércoles 2.

Se ha organizado una reunión a las 8:30 dirigida por Vin para analizar y resumir las jornadas desde que se empezó en Loyola hasta la llegada a Manresa. Se han hecho tres grupos en los que primero individualmente, luego cada grupo y después entre los tres grupos se han ido viendo, o se han propuesto, las partes positivas y las partes negativas del Camino Ignaciano.
Propuestas que serán presentadas a los responsables del Camino Ignaciano para que valoren el punto de vista de los peregrinos desde dentro, tanto en lo que se refiere al sentido espiritual del Camino como al material o el vivir de cada día en el Camino. Con sus cosa buenas, sus dificultades y sus carencias, tanto individualmente como en grupo.
Tras la reunión y el posterior desayuno, se ha proyectado un audiovisual y ha habido una charla por parte de Josep Sugrañes. Posteriormente se ha dedicado el tiempo restante para visitar La Cova y comprar recuerdos del Camino Ignaciano y la Casa d´Exercicis.
A las 12:00 nueva despedida de los peregrinos y esta es la definitiva pues ellos parten hoy a Barcelona y mañana de regreso a sus casas en Australia.
Después de la despedida estuve conversando con Isabel, responsable de la recepción de los peregrinos y después tuve el placer de conocer y mantener una larga conversación sobre distintos aspectos del Camino Ignaciano con Ramón Sanllehí Soler, Director Ejecutivo de la Fundación COVA SANT IGNASI de Manresa. Tras dicha reunión me volví a casa.

Como ya dije en la primera parte, ha sido una experiencia extraordinaria para mí los días que he caminado con este grupo. Puedo considerarlos a todos como mis amigos. Porque me lo han demostrado con gestos, palabras, sonrisas y muchos detalles.
También ha sido enriquecedor por el espíritu de solidaridad y el respeto entre todos. Detalles éstos que han crecido día a día entre todos. Qué diferencia de los primeros días a estos últimos. Yo no les conocía ni ellos a mí, e incluso entre ellos tampoco algunos se conocían.
En los primeros días se notaba esa incertidumbre de lo desconocido, qué nos espera, si seré capaz de conseguir llegar hasta el final, etc. Pero al final se han superado todas las dificultades, tanto físicas como materiales.
Comentando al final que tres lugares son los que más les han gustado y me han contestado: la Ermita de La Antigua, Arantzazu y Montserrat.
Y lo peor del Camino: la durísima subida a Biozkorna en la segunda etapa, las largas distancias en alguna etapa y los traslados que han tenido que hacer por no haber alojamiento para un grupo como este al finalizar la etapa.
Pero todo se ha superado y tengo la impresión de que alguno del grupo, tarde o temprano, repetirá.
Pulsando sobre las imágenes, aumenta su tamaño.

Nota: Todas las imágenes son propiedad del autor del blog.

No hay comentarios:

Publicar un comentario