De Cervera a Bujaraloz.
28.02.2013. Jueves. 4ª Etapa: Cervera – El Palau d´Anglesola. 34 km.
Me levanto a las 7:45, me aseo, preparo todo para la marcha y desayuno en la Hospedería, entra en el precio de 15€, café con leche, colacao, galletas, mantequilla y una tostada con aceite de oliva.
A las 8:10 comienzo a andar, siguiendo el Camino. Paso junto al restaurante Km 520 que tiene la marca del Camino Ignaciano en la puerta.
Más adelante paso junto a la Ermita de Sta. Magdalena, del S XIV que se encuentra en ruinas. Llego a un cruce, donde está el molino de Fonolleres y sigo recto. Más adelante paso por las obras del canal Segarra – Garrigues.
Entro por la calle Mayor a El Talladel a las 9:50. Sigo por la misma calle y por una carretera secundaria y llego a Tárrega a las 10:15. Entro por la Avenida de la Generalitat hasta la plaza del Carme. Continúo por la derecha y por una calle peatonal a la plaza Mayor junto a la Iglesia y el Ayuntamiento.
Cruzo el río Ondara y sigo recto hasta Vilagrassa llegando a las 10:47. Descanso hasta las 11:15 y continúo por una carretera en dirección a Balaguer. Cuando llego a una rotonda sobre la autovía sigo recto y entro a Anglessola por la calle Mayor hasta la plaza de Santa Ana llegando a las 11:41. Cruzo el Canal d´Urgell y sigo junto a él hasta el cruce de Bellpuig. Luego por un camino vuelvo a cruzar un canal y llego a Castellnou de Seana por la calle Calvario hasta la Plaza mayor. Son las 13:26.
Voy al Café Modern y pregunto para comer y alojarme. Me dicen que hay macarrones y pescado. Me parece bien. Me pregunta Francesc, el dueño del local, si he estado con el alguacil para la llave del Albergue y le digo que no, que acabo de llegar.
Me comenta que ya se encarga él de llamarle. Mientras como, se sienta y estamos hablando un rato. Como los macarrones y de segundo merluza rebozada con pimientos, flan, pan, vino y gaseosa, y un cortado. Pago 10€.
Cuando estoy terminando, la señora que me ha servido, que no es Dolors pues está en Barcelona en el médico, ha llamado al alguacil y dice que hay un peregrino alemán que tiene la llave. En ese momento entra en el bar Hans, el peregrino alemán de Hamburgo que conocí en Montserrat y que hasta hoy no he vuelto a ver. Le digo a la señora que le comente al alguacil que ya me arreglo con éste para la llave y así no tengo que molestarle.
Al rato, viene la señora y me dice que ha llamado en alguacil y que vaya al Centro de Salud, donde está trabajando, para conocerle y registrarme en el Libro de Acogida a Peregrinos. Estoy un rato hablando con Hans y me dice que el Albergue es muy básico y que solo tiene un pequeño calefactor. Hace mucho frío. El también ha llegado hace una hora.
Voy al Centro de Salud y estoy con el alguacil. Está cabreado porque dice que los del Café Modern se meten en su trabajo diciendo que entregan la llave del Albergue y haciendo un favor.
Me coge la mochila y la mete en la parte trasera de la furgoneta, donde tiene las herramientas, y me dice que monte. Está la furgoneta como para sembrar patatas dentro. Me lleva al Albergue, que es un vestuario del campo de futbol, me toma los datos y me da una sábana para la litera.
Mientras me ducho y me cambio me da una retahíla de las diferencias que tiene con los del Café Modern. Después de estar un rato hablando el solo le digo que en la guía que yo tengo también pone que en el Ayuntamiento y donde ellos tienen la llave del Albergue. Luego se va dándome las indicaciones oportunas sobre el Albergue. Joan se llama el alguacil.
Después de un rato, viendo las condiciones del Albergue, que está limpio y ordenado, pero muy frío, consulto la guía y decido seguir el Camino. Dejo una nota en la puerta para que cuando venga el alemán sepa que me he ido.
Son las 15:30 cuando me pongo otra vez en marcha. Salgo por la calle Mayor y luego, primero por una pista a la izquierda, y al llegar junto a una casa por otra de la izquierda, la segunda. Paso por el cruce de Golmés y el de Mollerussa. Por una carretera local a la derecha salgo a otra más adelante que la sigo a la izquierda. Llego a El Palau d´Anglesola a las 17:00 por las calles Nou y de las Eras.
Voy al Hostal Sant Antoni y me alojo en la habitación 102. No ceno en el comedor porque he comido suficiente y como unas manzanas que traigo en la mochila desde Igualada. Con esto me vale.
Etapa más larga de lo que tenía pensado, pues mi intención era quedarme en Castellnou de Seana pues es uno de los pueblos en los que hay gente que está implicada con el Camí de Sant Jaume y por estar con la Sra. Dolors, de la que tengo un grato recuerdo de la vez anterior, y para conocer a su hijo que también está muy implicado y se interesa también por el Camì Ignasiá. Pero como ya he explicado en la introducción de este Camino, por motivos obvios, me fui.
A última hora han llovido cuatro gotas, las justas para hacerme parar a proteger la mochila y luego nada más. Después de terminar la etapa sí que ha llovido más.
01.03.2013. Viernes. 5ª Etapa: El Palau d´Anglesola – Hostal Cataluña y Aragón. 44,4 km.
Me levanto a las 7:45, preparo todo. Después de desayunar fuerte y bien, hoy mi idea es andar una etapa larga, comienzo a andar a las 8:10. Salgo de El Palau por la calle de la Font y por la carretera a Fondarella y luego por un camino asfaltado cruzo el Canal d´Urgell y me alejo de él. Luego por pistas llego hasta un puente para cruzar la A-2. Sigo por el camino paralelo y luego cruzo las vías del tren. A lo lejos se ve el muñeco de la A-2. Por una pista llego a Belloc d´Urgell a las 10:07.
Salgo del pueblo por la calle Mina, cruzo las vías del tren y por un camino a la izquierda que lleva a Alcoletge. Por una pista de grava cruzo un puente sobre la A-2, luego otro pequeño puente y por el camino llego a la carretera de una urbanización, la cual atravieso.
Luego por un camino y un puente vuelvo a cruzar la autovía y sigo paralelo a la misma.
Más adelante la pista principal se va alejando de la misma y un poco más adelante ya se empieza a destacar a lo lejos la Seu Vella de Lleida. Entro en el polígono industrial, lo atravieso y paso otra vez las vías por un paso a nivel.
Cruzo el puente Pardinyes sobre el Segre y sigo recto hasta la estación de ferrocarril a donde llego a las 12:47. Entro a la cafetería, me tomo un Acuarius y un croissant. Sello en el Hotel Catalonia, como la vez anterior.
Continúo a las 13:00 y por toda la avenida junto al Segre dejo la ciudad. Voy por una carretera secundaria y luego por una pista. Más adelante, por una vía verde, paso debajo de la vía del AVE. Sigo el Camino y llego junto a la Iglesia de Bussenit a las 14:45. Como en la vez anterior, voy a comer a Can Nenet, pero está cerrada así que sigo el Camino.
Sigo por la carretera hacia la Cooperativa Bonfruit y más adelante tomo la pista que luego se convierte en senda. Paso el puentecillo sobre la riera y luego por pista asfaltada salgo a la N-II por el polígono industrial de Alcarrás. Paro a las 15:35 en el bar Cisco Florida y como un cuarto de tortilla de patatas y una cerveza sin. A las 16:00 retomo la marcha.
Sigo las marcas por una pista asfaltada que da un gran rodeo por la izquierda y al cabo de veinticinco minutos llego a Alcarrás. Me dirijo a la Pensión Capri pero no hay sitio. Miro la guía y a 5,6 km está el Hostal Cataluña y Aragón. Llamo por teléfono y reservo una habitación.
Retomo la marcha y salgo a la carretera que va de Torres de Segre a la antigua N-II y un poco más adelante por una pista a la izquierda saliendo junto a la fábrica Cemesa con su escultura. Llego a la rotonda que está bajo la autovía y paso bajo ella.
Por la carretera de servicio llego al hostal a las 15:05 y me alojo en la habitación 104. Al saber que soy peregrino me preguntan si he comido. Les digo que no y les comento lo que me ha pasado al llegar a Alcarrás.
Me dicen si quiero algo de comer, que me lo ponen. Como una ensalada y pollo asado a la brasa. Mientras comía, un camionero de Ciudad Real ha estado hablando conmigo, preguntándome sobre el Camino. El pensaba que el Camino de Santiago solamente era el que llamamos el Francés, de Sant Joan de Pie de Port a Santiago. Dice que le queda poco para jubilarse y que tiene la intención de andarlo.
Me voy a la habitación a asearme y descansar, a echar la siesta. Luego bajo a la hora de cenar: ensalada mixta, longaniza con guarnición, yogurt, vino y gaseosa. Con la habitación he pagado todo con 29,90 €. Luego me retiro a descansar hasta mañana.
La jornada ha sido larga, más de lo que había calculado, por la falta de alojamiento. La climatología hoy ha sido regular. Hasta Butsenit, unos treinta kilómetros, ha llovido ligeramente y a partir de aquí nada.
Casi he adelantado una jornada sobre lo previsto pues entre la etapa de ayer y la de hoy he adelantado bastante. Estoy en el límite entre Cataluña y Aragón, pero estoy bien y sin cansancio acumulado. El hostal pertenece a la población de Soses, la cual no figura en la guía como zona de paso.
He llamado a Candasnos a la Pensión La Colina para la habitación de mañana y me dicen que está cerrada, lo mismo que la de El Pilar. Me dicen que lo único que está abierto es el Hotel La Cruzanzana que está junto a la carretera antes de entrar en el pueblo. Como la vea anterior, me dice que el sábado cierran los dos y ellos tienen abierto el domingo. Llamo luego al Hostal pero no cogen el teléfono.
02.03.2013. Sábado. 6ª Etapa: Hostal Cataluña y Aragón Bujaraloz. 59,2 km.
Comienzo a andar a las 7:10 después de desayunar un Cola cao y un croissant. Mañana fresca pero despejada, ideal para andar. Tomo la carretera paralela a la N-II y por una pista secundaria pasa junto a una granja.
Yo he seguido las marcas, que dan un rodeo a la misma. Pero se puede atajar por el camino que pasa por la puerta del pabellón.
No está vallado ni tiene ninguna indicación de prohibido y entre frutales, se llega al mismo camino que hay que seguir para entrar en el pinar.
Sigo luego entre árboles frutales y llego a la muga de las provincias de Cataluña y Aragón después de un descenso por pista de piedra suelta.
Salgo del mismo por el escalextric que hay montado y paso por el puente donde están pintados los colores de las banderas de la dos Comunidades autónomas que hoy piso, Cataluña y Aragón.
Después de la fuerte subida, atravieso el túnel por la N-II y llego al polígono industrial de Fraga. Cruzo la carretera y por el camino del cementerio llego al puente peatonal blanco que pasa sobre dicha carretera, para hacer la entrada en la ciudad. Bajo el fuerte descenso que forma la calle Obradores Revolt y llego a la plaza del Ayuntamiento, donde sello la Credencial. Son las 09:22.
Bajo por las calles en pendiente hasta llegar al paseo junto al río Cinca, sigo hasta el segundo puente siguiendo las flechas amarillas del Camino de Santiago. A partir de aquí no veo las flechas naranjas del Camino Ignaciano que, aunque a la inversa, me han estado acompañando.
En constante subida por una pista, llego a una explanada y de frente está la pista que sube a los Monegros. Llego a un llano, paso junto a una gran antena y más adelante a un Área abandonada llamada El Ventorrillo.
Por el camino que va detrás de la gasolinera y junto a la N-II por la izquierda, llego a Las Ventas del Rey. Son las 11:52. Descanso un poco, tomo una cerveza sin y una ración de tortilla de patatas con pan tumaca y a las 12:15 reemprendo la marcha.
Siguiendo las marcas amarillas y más adelante, junto a una caseta de Telefónica, atravieso la carretera y unos cuatro kilómetros más adelante, a la derecha de la carretera están la gasolinera y el Hostal La Cruzanzana y me dirijo allí.
Son las 14:40 y ya llevo casi cuarenta y kilómetros. Mi intención es quedarme aquí hasta mañana, pero mi gozo en un pozo. Resulta que el hostal lleva cerrado desde antes de comenzar el invierno y en el bar me dicen que aquí no hay dónde alojarse. Estoy a más de veinte kilómetros del lugar más cercano donde poder hacerlo. Y para colmo, tampoco dan comidas y hoy sábado no hay autobús hasta bien entrada la tarde.
Tengo que caminar todavía dos kilómetros y medio más para llegar al próximo pueblo, Candasnos. Llego al mismo a las 15:05. Me dirijo al Hogar del jubilado, como la vez anterior, pero ya no está Mabel que fue quien me atendió. Han cambiado los arrendatarios hace poco, por eso no recibía contestación a mis llamadas.
De todas formas, aunque no dan comidas me preparan un bocadillo de jamón y me tomo un Acuarius y a las 15:20 me pongo de nuevo en marcha. Serán unos cuantos kilómetros más, pues hasta Bujaraloz, no hay ninguna posibilidad de alojamiento.
Salgo del pueblo y paso junto a las dos pensiones, que están cerradas, y luego junto a la casa rosa que fue una brasería. Tomo la carretera en dirección a Caspe y más adelante sigo por una pista paralela a la N-II. Llego a la fuente y área de descanso de El Gallego y por el camino en fuerte descenso llego a un llano, cruzo por un puente un canal y sigo a la derecha junto a la carretera.
Al fondo se ve el toro de Osborne y un poco después llego a un cruce de caminos y en fuerte bajada otra vez por el que está de frente. Al fondo ya se ve Peñalba. Paso junto a unas naves y cruzo por debajo la carretera N-II junto al río canalizado. Son las 17:09.
Atravieso el pueblo y otra vez en fuerte subida llego a la carretera de Caspe. Más adelante, por una pista marcada como Camino Rural atravieso extensas zonas de regadío. Llego junto a la caseta donde la vez anterior estuve descansando un rato y sigo por una gran extensión agrícola hasta ver a lo lejos Bujaraloz.
A la entrada al pueblo paso junto a la Iglesia donde vi el gran Nacimiento pero está cerrada. Son las 19:25. Así que me voy al Hostal El Español y me alojo en la habitación 5. Me aseo, descanso un rato y bajo a cenar. Es Self Service y se cena bien. Lo que más me gusta es la fuente en la que mana chocolate caliente y alrededor hay trozos de frutas, golosinas y pastelitos para poder rebozarlos en el chocolate. Pago por la habitación y la cena, con café y chupito de hierbas, 40,25 €. Hacen descuento a los peregrinos enseñando la Credencial.
Etapa larguísima. Bastante más de lo que tenía previsto. Buen entrenamiento para la Valvanerada. Día medio nublado y sol, pero sin calos. Ideal para andar. Antes de llegar a Bujaraloz he entrado en la Provincia de Zaragoza.
No me extraña que por esta zona parezca que están dejados de la mano y el amparo de las instituciones, pues como lo pude apreciar la vez anterior, los pueblos no tienen servicios ni transporte el fin de semana. Todo se para. Así difícilmente podrán crecer económicamente. No me extraña que algunos todavía se quejen. La mayoría, ya, ni lo intentan. Lo sé por las conversaciones que he tenido con algunos vecinos de los pueblos por los que he pasado, esta vez y la anterior. Creo que a Mabel, una mujer muy activa y dinámica, a la que conocí el año pasado en Candasnos, le ha pasado algo de esto.
A continuación, un pequeño reportaje fotográfico.
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Nota: Todas las imágenes son propiedad del autor del blogg.
Interesante blog, yo mañana voy a alcarraz
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