domingo, 20 de enero de 2013

Enganchado al Camino.

'Enganchado' al Camino.

«¿Por qué la gente flipa tanto con el Camino de Santiago?. La mayoría de las personas que lo han hecho, sean sus motivos religiosos o no, vuelven diciendo que han cambiado o toman decisiones que atestiguan ese cambio. También a mi me pasó». Después del segundo camino «ya estaba un poco enganchado».
He sido, de momento, trece veces peregrino de la Ruta Jacobea, y conté mis experiencias en el Camino, en la charla que impartí en el Centro Civivox, del Ayuntamiento de Pamplona, y en la casa de cultura Zelai Arizti de Zumarraga, bajo el título 'Hasta Santiago... 946.220 pasos', la conferencia en este caso fue organizada por Urgadiel, la asociación de diabéticos del Alto Urola.
Completé mi primer camino «en la primavera de 2004, junto a mi hijo Aitor, que entonces tenía veinte años. Fue por motivos deportivos». Arrancamos en Roncesvalles y seguimos el camino francés. «La experiencia fue positiva. Aprendimos mucho. Estábamos acostumbrados a andar en el monte y seguíamos los distintivos de pintura roja y blanca que marcan las rutas de gran recorrido, pues el Camino es también un GR. Nos costó días saber que había que seguir las flechas amarillas. Para entonces habíamos andamos unos cuantos kilómetros de más».

Una petición.
La experiencia resultó tan positiva que en septiembre del mismo año ya estaba arrancando mi segundo camino. Esta vez en solitario, desde Irún por el Camino del Interior y con una petición. «Trabajo para mi hijo».
A partir de León me acompañó Aitor. En el primer Camino comentó nada mas llegar a la plaza del Obradoiro en Santiago, que no volvería a andarlo, pero cuando me llamaba y le decía por la zona que andaba le venían los recuerdos, le picó el gusanillo y a partir de allí se me unió hasta el final.
Cual fue mi sorpresa cuando acababa de llegar a O Cebreiro, el primer pueblo de Galicia, y me telefonea mi mujer diciendo que habían llamado al chaval de una empresa de Legazpi.
Mi tercer camino se retrasó casi un año por causa de fuerza mayor. Lo iba a andar en abril de 2005, pero cuatro días antes sufrí un accidente laboral gravísimo que me tuvo catorce días en coma. No obstante me recuperé y en marzo de 2006 volví a partir hacia Santiago desde Roncesvalles.
Este fue el que me cambió. Me lo habían advertido y tenía curiosidad por saber qué suceso misterioso ocurre, qué te cambia o te hace ver las cosas de manera diferente. Creo que noté lo que ocurre. El camino de Santiago es como la vida misma. Tienes un objetivo que es llegar a Santiago de Compostela.
En la vida, si tienes claro a donde quieres llegar, pocas cosas habrá que te puedan detener.
Uno de los momentos más especiales de mi experiencia jacobea lo viví en el octavo Camino. «Fue el 31 de diciembre de 2009. Al sellar la credencial para sacar la Compostela en la Oficina del Peregrino me dijeron que necesitaban un peregrino para la ceremonia de la apertura de la puerta santa. De esa forma me convertí en el primer peregrino en cruzar esa puerta tras su apertura para el año jacobeo».

Los Príncipes de Asturias.
Guardo multitud de anécdotas vividas en la ruta y he conocido a un sin fin de personas en el Camino y de personajes del Camino. Unos buenos y otros no tanto.
Al inicio del noveno camino, el de febrero de 2010 viví una de esas anécdotas. Cuando empecé coincidía con la ceremonia de apertura del Camino Jacobeo del Año Santo, en Roncesvalles y me invitaron allí para la ceremonia. Los Príncipes de Asturias acudieron para esa ceremonia, pero como estaba nevando y yo no podía esperar más para partir, finalmente no pude estar presente en la misma. No obstante, el abad me los presentó en la sacristía y estuve un ratito conversando con ellos sobre el camino».
En 2008 viví la peor experiencia. Un peregrino alemán murió prácticamente en mis brazos tras sufrir un infarto. Me quedé tan impactado que me volví a casa y no regresé a andar el Camino hasta el año siguiente.
Yo aseguro que cualquiera puede andar el Camino y lo recomiendo. Es cuestión de mentalizarse y prepararse un poco. Tal y como dice el título de mis conferencias son 946.220 pasos. Están medidos con un podómetro. Son los pasos que di, en mi octavo Camino, desde Roncesvalles hasta Santiago.
He «andado», como me gusta decir, el Camino trece veces pero ahí no termino. Este mismo año pienso completar el de la Costa.
Buen camino peregrino.

Y ESTOS SON DE MOMENTO MIS CAMINOS A SANTIAGO:

15.05.2004
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

12.10.2004
IRUN – SANTIAGO
VASCO INTERIOR

18.05.2006
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

06.10.2006
BEASAIN – SANTIAGO
VASCO INTERIOR

23.05.2007
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

11.08.2007
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

21.06.2009
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

31.12.2009
SARRIA – SANTIAGO
FRANCES

14.05.2010
RONCESVALLES – SANTIAGO
FRANCES

24.07.2010
ZUMARRAGA – SANTIAGO
FRANCES

30.12.2010
SARRIA – SANTIAGO
FRANCES

08.08.2011
SAN JUAN DE PIE DE PUERTO – SANTIAGO
FRANCES

30.06.2012
RONCESVALLES – SANTIAGO

FRANCES

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